Resumen:
Esta investigación es un análisis de la situación de la mujer en el mercado laboral ecuatoriano, debido a que constituye un ámbito importante para la economía del país donde las diferencias de género persisten y ponen en desventaja a las mujeres. Para explicar la probabilidad de formar parte del mercado laboral se empleó un modelo probit, en el que se incluyó variables como la edad, educación, ingresos y otras referentes a la esfera familiar, como el número de hijos y la presencia de la abuela en el hogar. Se logró probar que las responsabilidades familiares reducen la probabilidad de la mujer de trabajar, sobre todo cuando tienen hijos menores de 6 años, para los hombres los resultados evidencian que las responsabilidades de este tipo, no son un obstáculo a la hora de trabajar, existiendo una relación favorable de estas variables sobre su probabilidad de formar parte de la fuerza de trabajo. Se incorporó también en el análisis el rol de agencia personal, que constituye un importante elemento en materia de género y desarrollo, como un factor que puede aportar a mejorar las posibilidades de la mujer de ser parte del mercado laboral y acortar la brecha de las desigualdades. Para esto, se construyó un indicador para medir (aproximadamente) el rol de agencia personal para las mujeres y posteriormente se incorporó esta medida como variable explicativa de la probabilidad de trabajar. Los resultados efectivamente comprobaron que el rol de agencia juega un papel muy importante y aporta positivamente a la situación de la mujer, aumentando sus posibilidades de trabajar. Así, este análisis logra evidenciar que la decisión de integrar el mercado laboral de hombres y mujeres está muy marcada por los roles y responsabilidades enraizados en nuestra cultura; y potenciar el rol de agencia personal puede mejorar las condiciones y oportunidades de la mujer en el mercado laboral.