Resumen:
El tratamiento para lesiones graves en la piel por quemaduras sigue siendo uno de los principales retos a afrontar en la medicina moderna, ya que busca mejorar la reducción de la morbilidad. La búsqueda por innovar en esta área genera lo que se conoce como bio-impresión 3D, la cual es vista como una técnica prometedora para solventar la necesidad planteada; pero con la desventaja de que su aplicación conlleva costos muy elevados. Por esta razón, el presente proyecto busca diseñar e implementar un método de bajo costo para la impresión de injertos de piel, modificando una impresora 3D comercial.
Para llevar a cabo este proyecto se decidió basarse en un método de fabricación de injertos funcionales desarrollado por [1]. Luego, se escogió la alternativa de solución más viable, la cual consistió en la adaptación de un módulo de extrusión de bio-tintas a una impresora 3D comercial de bajo costo, buscando una casi nula modificación del hardware. A partir de esto se diseñaron las piezas y mecanismos del sistema de extrusión. Para el control de los actuadores de la impresora se utilizó un programa de código abierto capaz de generar los códigos G requeridos para la correcta extrusión de los materiales biológicos. Y posteriormente, se determinó el actuador a usar y las conexiones a realizar.
Se obtuvo como resultado un prototipo de bio-impresora con un costo de implementación menor a 600 dólares, de la cual se espera obtener 100 cm2 de tejido después de 40 minutos, reduciendo tiempos de fabricación de injertos.