Resumen:
La nutrición es un derecho humano fundamental y, por tanto, debería ser
considerada como componente básico de las estrategias de desarrollo en
todos los países del mundo.
La insuficiencia permanente de alimentos en cantidad y calidad adecuados
para satisfacer las necesidades energéticas de toda la población (subnutrición)
encuentra su manifestación más grave en la desnutrición infantil. De las dos
formas que asume: el bajo peso y la corta talla con respecto a la edad, el
retardo del crecimiento es particularmente importante en Ecuador debido
tanto a su mayor incidencia como a la irreversibilidad de sus efectos
negativos sobre el desarrollo de los individuos y de la sociedad.
Si bien el combate a la extrema pobreza es parte importante del abatimiento
del hambre, no puede esperarse que los esfuerzos destinados a reducirla
aseguren por sí solos y en un plazo razonable la erradicación del hambre y su
principal consecuencia, la desnutrición infantil. Por otra parte, es posible
obtener logros significativos en materia de desnutrición mediante programas
nutricionales aun cuando no formen parte de amplios y costosos programas
antipobreza.
El problema se puede definir como: niños en extrema pobreza con riesgo de
desnutrición infantil y sus consecuencias negativas sobre el capital humano.
La población objetivo (o beneficiarios del proyecto) son niños entre 6 y 12
años de edad con riesgo de desnutrición.
La desnutrición infantil y/o las condiciones externas desfavorables que
rodean a un niño son causantes de que el infante no se desarrolle en forma
adecuada, y este desarrollo inadecuado es la causa de que cuando llegue a
adulto tenga menor productividad laboral, debido a que su coeficiente de
desarrollo y sus habilidades serán inferiores a las de una persona normal.
Debido a su rápido crecimiento, los requerimientos nutritivos son más
elevados y específicos y, por ende, difíciles de satisfacer. Por otra parte, el
niño depende de terceros para su alimentación y muchas veces éstos no
tienen los recursos económicos suficientes o carecen de un adecuado nivel
cultural y/o educativo como para cumplir este rol.
El proyecto tiene como finalidad disminuir los casos de desnutrición
mediante la prevención y mejorar el desarrollo de capital humano en la
parroquia Barreiro, del cantón Babahoyo, Provincia de los Ríos.
El reconocimiento de la importancia de eliminar las situaciones más extremas
de hambre se expresa en que el primer objetivo de desarrollo de la
Declaración del Milenio es la erradicación del hambre en el planeta. Respecto
de este objetivo se establecen metas específicas, otorgándosele así la misma
prioridad que a la mitigación de la pobreza.
Según el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), a partir de 1995
tanto la Pobreza como la Extrema Pobreza en el Ecuador han experimentado
un constante crecimiento en los hogares urbanos.
El Ecuador presenta un complejo panorama en el campo de la salud, la
mortalidad infantil y la materna son altas. Se estima que mueren alrededor de
33 niños por cada 1000 que nacieron vivos, estos problemas ocurren en un
marco de pobreza que impide a la población satisfacer sus necesidades
básicas y lleva (principalmente a niños y madres) a condiciones de mala
nutrición en general y deficiencia de micronutrientes críticos que los vuelven
vulnerables frente a enfermedades de naturaleza infecciosa y transmisible
principalmente
Enfocar la población objetivo de 6 a 12 años, es necesario debido a que en la
actualidad no se esta desarrollando ningún programa o proyecto para tratar
de disminuir la desnutrición entre los niños que están este rango de edad.
Instituciones como el INNFA se están enfocando en programas para niños
entre 0 y 5 años, ya que sustentan que es más importante su intervención en
esta etapa puesto que el problema afecta significativamente el proceso de
maduración cerebral y su rendimiento posterior.
Está es la razón por la cual se justifica implementar este tipo de programa, la
falta de oferta que existe en proyectos sociales que busquen como objetivo
primordial la disminución de la desnutrición infantil en niños de 6 a 12 años,
provoca que el problema continúe acrecentándose, el cual reflejará sus
consecuencias en el desempeño de los futuros miembros de la sociedad.