Resumen:
En los últimos tiempos en que los ojos del hombre han estado dirigidos hacia el espacio, alentados por el primer satélite el Sputnik en 1957, y luego el desembarco del hombre en la Luna en 1969, éste ha vuelto a mirar a lo que una vez consideró la máxima conquista del hombre, el poder trasladarse de un lugar a otro sobre las olas de los océanos. Pero esta vez se miró más profundo: su contenido, se está mirando lo que encierra incluso el suelo bajo los océanos, todo para beneficio y futuro de la humanidad.