Resumen:
El riesgo de padecer desnutrición condiciona a la morbimortalidad de todas las
personas y a nivel mundial, favorece a uno de los mayores problemas sanitarios.
Además, en pacientes hospitalizados, es incluso mayor la frecuencia de esta condición.
Su prevalencia puede afectar entre el 40 y 45 % de los pacientes ingresados a
hospitalización. Las causas pueden ser variadas, como los efectos que la enfermedad
misma provoca y la poca obtención de nutrientes provenientes de la alimentación.
(Alpizar, 2016)
Las enfermedades psiquiátricas como la esquizofrenia son consideradas crónicas, esto
es demostrado a través de su tasa de mortalidad, siendo del doble de la población
general, con una esperanza de vida de 20% menos, ya que existe prevalencia a
desarrollar enfermedades como las cardiovasculares. Además, tenemos a la obesidad,
que también tiene una alta prevalencia en la esquizofrenia, que se relaciona con los
antipsicóticos que a los pacientes se les aplica y que influye en el padecimiento de
hipertensión, dislipidemia, resistencia a la insulina y diabetes. La alimentación en la
esquizofrenia puede agravar o mejorar los síntomas de la esquizofrenia. (Nunes, 2016).